Existe una creencia que dice que a veces lo viejo es lo mejor nuevo, no necesariamente debemos usar la palabra “viejo” sino más bien “clásico”, aquello que estuvo de moda en el pasado en algún momento puede convertirse en la nueva moda del futuro y ahora puede destacar y brillar de nuevo, incluso mejor que antes. Este concepto aplica en muchos ámbitos y por supuesto la decoración del hogar no es la excepción, los azulejos de cocina rústicos, lucen como aquellas baldosas que solían ser muy comunes en el pasado, hechas a base de materiales simples como el barro y producidos a mano, su apariencia es humilde y simple, pero muy estética y sus colores por lo general, son tonos cálidos y naturales como marrones, rojizos y amarillos. Visualmente, otorga una sensación especial a cualquier estancia, especialmente para los amantes de la naturaleza sus terminados y textura se asemejan a las rocas, la madera o terracota. Pueden ser empleadas tanto en exteriores como en interiores, pero al tratarse de este último, una de las mejores estancias donde pueden utilizarse es sin duda la cocina.
En los últimos años, muchos expertos en decoración recomiendan usar los azulejos rústicos en conjunto con colores claros y suaves para así balancear su apariencia áspera, el contraste termina por ser una combinación muy estética. La cocina es una estancia donde estos colores claros están muy presentes, ya sea en los platos, utensilios, electrodomésticos, alacenas, etc. Para crear una buena combinación, no es necesario cubrir todo con azulejos rústicos, imagine lo bien que se vería una cocina a base de tonos claros como el blanco y el beige con algunos detalles más cálidos que generen un ambiente más vivaz, por ejemplo una serie de azulejos bordeando el suelo y las paredes, o una franja a media superficie rompiendo el monótono color plano y dándole vida, o incluso algunas pocas baldosas colocadas aquí y allá, ya sea al azar o formando patrones, estas resaltarán y lucirán como un adorno excelente.
Los azulejos para cocina rústica, por sus colores cálidos y naturales, además hacen que la madera luzca bien en conjunto. Viendo la cocina desde la distancia, usted podrá notar como los distintos tonos cálidos juegan entre sí para generar una presentación agradable en perfecta armonía con sus muebles de cocina, una bella imagen ¿no lo cree? Del mismo modo, es importante que tenga en cuenta el color de su encimera, para que así todas las piezas de su cocina estén en perfecta armonía, con esto sentirá como si la decoración cobrara vida.
Otra gran idea para el uso de estos azulejos puede ser no solo limitarse a combinar claros y cálidos si no a dejar libre a su imaginación y producir algo más colorido. Es común encontrar en cocinas combinaciones rústicas con algunas más comunes, estas últimas por lo general de colores lisos como el amarillo, azul, verde o incluso negro. El contraste entre lo moderno y lo clásico hará que el ambiente se sienta más dinámico, lleno de vida y agradable, estas sensaciones son muy valiosas dentro del hogar y la cocina, especialmente para aquellas personas que encuentran un placer especial al cocinar.
Ya sea como necesidad diaria o pasatiempo, el trabajar en la cocina rodeado de un ambiente hogareño y agradable genera un impacto en nuestro estado de ánimo y si usted es alguien que disfruta cocinar sabrá que cuando nos sentimos bien, nuestros alimentos tienen un mejor sabor, así podremos disfrutarlos mejor en compañía de nuestra familia y al final del día eso es lo más importante, el sentirnos bien dentro del propio hogar.